Pongámonos en situación

A lo largo de la historia hay asuntos que tienen mas prioridad en ciertas etapas. En su momento fue la creación del fuego, la invención de la bombilla o de la imprenta. Tales cosas en la sociedad en la que vivimos ya no son importantes porque todos tenemos al alcance de la mano una cerilla y un libro. Pero todavía existe un tema, el gran tema que nunca ha dejado de ser relevante desde el comienzo de la humanidad y lo seguirá siendo hasta el fin de ésta. Reconozco que mi punto de vista es bastante pesimista, pero sinceramente no creo que haya tal invento que solucione el drama que hay en las relaciones entre hombres y mujeres, por cierto ese es el tema. Advertencia, no puedo ser objetiva ya que soy mujer, sensible, rencorosa...etc pero principalmente no lo voy a ser porque no quiero serlo. Una vez tomada esta decisión, comenzaré citando la definición de relación por la RAE: trato de carácter amoroso, definición de mujer: persona del sexo femenino, hasta aquí bien ¿no?. Mi siguiente paso ha sido escribir “hombre” en el buscador y sin sorpresa alguna me encuentro entre varias definiciones, con ésta: Individuo que tiene las cualidades consideradas varoniles por excelencia, como el valor y la firmeza. Y ahora es cuando me rió, lo sigo haciendo, valor y firmeza, si esto es verdad, yo soy Pocahontas con un abrigo de tejón. Valor? Dile a un hombre: tenemos que hablar. Si no sale corriendo es por no desprestigiar a los de la RAE. Los hombre son firmes....esta es aún mas fácil de comprobar, deshazte de tus prendas delante de él, sencillo, bajo mi experiencia, si es cierto que he visto firmeza pero precisamente no ha sido en sus palabras y la mayoría de las veces la veo fugazmente. Aclaradas estas cuestiones, tener una relación sentimental con un hombre es como un trabajo. Te hace feliz, te cansa, te estresa, te hace desgraciada, finges tu carácter, tienes que dar explicaciones incluso de tu vestimenta, te hace sentirte realizada, te enojas, sientes ilusión y decepción. Miento, no puedo compararlo con un trabajo porque no obtenemos un salario a cambio y os aseguro que un hombre no os va dar cuarenta pares de zapatos. Las bases de una relación dicen que son la confianza, la fidelidad y el diálogo. Cuéntale una intimidad a tu pareja, hay un cien por ciento que no lo va a contar, tengo total certeza, total no te estará escuchando. Al escribir fidelidad en este contexto me resulta tan gracioso, dicen que de ilusiones se vive, a esta en concreto ponle énfasis. Una conversación con tu gran amor la podrás llevar a cabo antes del coito, jamás después o si todos los deportistas se lesionan.. Como en todo hay excepciones, ese hombre detallista, caballeroso, generoso, fiel, atractivo, compresivo...etc Señores de la RAE aquí tienen la definición de utopía, de nada. ¿Una conclusión? Las relaciones entre mujeres y hombres no cambiarán, sé que no es muy alentador... sin embargo creo conveniente hacer una llamada de atención: Hombres del mundo no cambies, si lo hicierais sería muy aburrido y dios!, nos arrebataríais el dulce sabor de venganza!!jajaja En lo mas profundo de mi ser, os adoro o eso creo...Besitos!!!